Este titular es un gancho a medias verdadero, a medias falso, amarillista quizá. El mito que rodea a la sexualidad de Anne Igartiburu se ha convertido en una de las preguntas redentoras en círculos de forococheros, taringueros, entendidos de la moda y de la farándula popular.

La presentadora, buque insignia de RTVE durante años, cuenta con una feminidad especial. A primera vista, parece una valquiria nórdica o una belleza típica del Renacimiento, pero si se paran a observar, también se percatarán de su elevada estatura y la estrechez de sus caderas. En el aspecto biográfico también se vislumbran indicios de que la vasca, es vasco: sus hijos son adoptados, no biológicos. Este hecho desencadena las más aviesas sospechas de los usuarios de los foros.

¡Quién lo diría! (Fuente: Te Interesa).
¡Quién lo diría! (Fuente: Te Interesa).

Pero Anne no es transexual. Entonces, ¿qué es? Pues bien, a la vez, hombre y mujer. La vizcaína nació con el Síndrome de Morris, una enfermedad de tipo sexual que afecta a la sintetización de las hormonas sexuales masculinas, los andrógenos. En cristiano, el Síndrome de Morris o pseudohermafroditismo masculino consiste en nacer hombre, pero físicamente parecer una mujer ‘al uso’.

En lo tocante al aspecto biológico, esta especial disforia de género, afecta al portador de manera singular en su vida. Durante las primeras etapas de lo que se conoce como ‘diferenciación sexual’, el embrión ya reconocido como varón no produce ni capta los andrógenos y sí los estrógenos, la hormona sexual femenina. Su cariotipo descubre que es un hombre (XY), pero fenotípicamente, es una mujer.

Naomi Campbell, 'La Diosa de Ébano', también sudre Síndrome de Morris. (Fuente: Telemaryucatan.com).
Naomi Campbell, apodada ‘La Diosa de Ébano’, también sudre Síndrome de Morris. (Fuente: Telemaryucatan.com).

Las consecuencias de padecer la enfermedad de Morris son variadas y profundas, desde el punto de vista íntimo: amenorrea (falta de regla), vello inexistente en axilas y pubis, vagina ciega de aspecto infantil, carencia de útero, testículos sin desarrollo y alta producción de testosterona, no sintetizada. Esta disforia, además de problemas físico-biológicos, puede causar trastornos psicológicos relacionados con la confusión sobre la identidad sexual, como ocurre con transexuales, que no dejan de sufrir disforia de género respecto a su sexo anatómico.

La nueva imagen de los productos de belleza CIEN de Lidl no es la única en sufrir el Síndrome de Morris. La actriz Nicole Kidman y la modelo Naomi Campbell padecen también este tipo de enfermedad. Aún está por comprobar si una de sus consecuencias es generar mujeres descomunales. Fátima Báñez, Ministra de Empleo, es la desgraciada excepción que confirma la regla.

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