Autora: Cristina Callao.

Hoy en día, el sexo anal es una práctica habitual entre todo tipo de parejas sin importar sus preferencias sexuales. Y es que estimular el área anal es otra forma más de experimentar nuevas sensaciones y sucumbir al goce más absoluto, pues después del clítoris, el ano es la zona con más terminaciones nerviosas del cuerpo, por lo que es especialmente sensible. De hecho, para alcanzar el punto P de los hombres es necesario recurrir a la estimulación anal.

Pero, ¿qué es lo primero que se necesita para disfrutar de la experiencia? Pues bien, lo primero de todo será conseguir imponerse a los tabúes pre-escritos social y culturalmente y lanzarse a explorar, sin miedos, con curiosidad y con información. Y para ello estoy yo, para facilitarte unas cuantas recomendaciones que te serán de gran utilidad, para que ésta experiencia sea recordada tan placentera y excitante que no dudéis en repetir. Ya sea solos o acompañados, con mujeres u hombres, con juguetes eróticos o con las manos. Recordad que lo bueno del sexo es que los límites los decide uno mismo.

Empezamos:

#1 Aléjate del miedo, las tensiones y los nervios.

Un estado nervioso nos va a dificultar la tarea, y es por ello que os recomiendo que os relajéis, que os dejéis llevar por la excitación y que confiéis en vuestra pareja sexual (en caso de hacerlo acompañadxs), ya que la relajación es el paso previo e indispensable para lograr luego la dilatación del músculo del esfínter.

Una buena relajación es imprescindible para disfrutar del sexo anal. | Fuente: Wikipedia.org.

#2 Higiene.

La higiene debe ser algo a tener en cuenta siempre, no sólo en el sexo anal. Aunque sí bien es cierto que la parte anal requiera un cuidado más minuciosa.

El ano (la parte externa) debe estar limpio y para ello puedes usar agua y jabón. Con el recto (la parte interna del ano) pasa exactamente lo mismo, sería conveniente evacuar o utilizar un enema –para limpiar la zona- un rato antes de poner en marcha dicha práctica.

#3 Uso de preservativo.

¡MUY IMPORTANTE! Si bien es cierto que no nos podemos quedar embarazadas, seguimos expuestos a las ETS y, a parte, la mucosa rectal es una vía de entrada de bacterias, así que después de una penetración anal hay que retirar el preservativo si es que se quiere introducir en la vagina.

#4 Uso de lubricante.

Recordad el paso número #1 RELAJAOS. Hay muchas formas de disfrutar eróticamente del placer anal pero es muy importante su lubricación. Podéis recurrir a lubricantes de base agua (más líquidos pero su efecto lubricante se evapora antes)  o silicona (más densos y con más duración que los de base al agua), ambos son compatibles con los preservativos y necesarios tanto en la exploración previa como en la penetración, que debe ser cuidadosa, suave y paulatina.

Juguetes, como las bolas chinas, pueden utilizarse para dilatar el esfínter. | Fuente: Wikipedia.org.

#5 Técnicas.

Las técnicas más comunes incluyen acariciar el esfínter anal abriéndolo con un dedo (bien lubricado) para su masturbación o estimulándolo para una posterior penetración o sexo oral. Se pueden introducir dildos, vibradores, plugs, perlas anales, etc. durante la dilatación del esfínter y posterior camino hacia el recto.

El sexo oral-anal es otra forma de disfrutar del sexo anal, tanto activa como pasivamente. Se puede probar la masturbación simultánea, es decir, mientras se está estimulando el ano, se puede estimular el clítoris o el pene para aumentar la excitación de manera acrescente.

#6 Disfruta.

El sexo anal puede producir grandes satisfacciones eróticas y sexuales en la pareja, así que relájate, disfruta y experimenta, y si aún te quedan dudas puedes ponerte en contacto conmigo a través de mi correo electrónico: psicóloga@cristinacallao.es; o consultar mi página web:  www.cristinacallao.es.

Imagen de portada: Flickr.com.

Entradas relacionadas