Ir de Erasmus y otras formas de hacerlo con extranjeros

Fiesta continua, turismo, diversión, amigos y ligues extranjeros… A pesar de que se trata de una beca de estudios, lo cierto es que la palabra Erasmus lo asociamos a casi todo menos al hecho de ir a clase o hacer exámenes.

Es frecuente asociar esta estancia en el extranjero con el sexo. Bien lo reflejó el medio de humor El Mundo Today con esta noticia: «Los Erasmus que no se hayan acostado con nadie las dos primeras semanas, perderán su beca».

¿A qué se debe esta fama? Yo os voy a contar un poco mi opinión desde mi experiencia propia (no solo  la mía personal, sino la que presencié por allí).

Lo primero es que la mayoría de los estudiantes que se van de Erasmus suelen tener una edad entre 20 y 24 años, una etapa en la que las hormonas están -todavía-  muy revueltas. Para muchos es su primera vez viviendo fuera de la casa de sus papis, por lo que la necesidad de descontrolarse es aún mayor. Eso sin mencionar que vivir en «tu propia casa» implica que puedes llevarte gente a dormir a tu cama.

Si a esto le añades que algunos van siendo vírgenes y el exceso de alcohol en las fiestas, el cóctel resultante puede ser explosivo. Además, es raro que los estudiantes extranjeros tengan que esforzarse mucho para aprobar sus asignaturas.

Los que se van a vivir a una residencia de estudiantes lo tienen bastante fácil para pillar, porque los erasmus suelen tener un ambiente cerrado, osea, que hacen pandilla, y con las aplicaciones como Tinder prácticamente lo tienes asegurado. Otra de las ventajas es que probablemente en cosa de un año no vuelvas a ver a tus compañeros de residencia; por lo que desmelenarse es bastante más fácil que en tu país de origen. 

Cafetería Erasmus en Salamanca

La típica fantasía de liarse con alguien de otra nación es fácilmente realizable, tanto para estudiantes que vienen de fuera, como para los nativos que viven en estas residencias universitarias con gran número de extranjeros. Si no tienes intención de salir de España pero también te pone la idea de montártelo con alguien que no hable tu idioma, prueba a buscar en tu ciudad los lugares frecuentados por Erasmus.

También es habitual los que se echan parejita durante su beca. Esto tiene su riesgo, sobre todo si cada uno vive en un país diferente, es una relación que probablemente tenga fecha de caducidad, a menos que se les dé bien las relaciones a mucha distancia. Que viva el amor internacional.

¿Y si te vas de Erasmus teniendo ya pareja? Muy a menudo se oye lo de que es imposible estudiar en el extranjero y ser fiel. Esto por supuesto es una chorrada, conozco más de uno que teniendo a su pareja en España (o cualquier otro país de origen) ha sido totalmente fiel. (No se muere nadie por pasar seis meses o más sin sexo). Eso sí, probablemente te pierdas una parte vital de la experiencia que es difícil conseguir de otra forma.

Para ir finalizando, un par de consejos por si te vas a ir a estudiar fuera de tu país. Cuidado con cometer locuras: vas a estar probablemente a varios cientos de kilómetros de tu casa e ir al médico o a la policía en un sitio donde no se habla tu idioma es más difícil de lo que parece.

Usad protección siempre y, muy importante, comprobad cómo está la ley en cuanto al aborto en el sitio donde vais a vivir: No en todos los países es igual de sencillo conseguir pastillas del día después.

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