Premios BONOBO: reflexionando sobre el erotismo

El pasado martes 21 de enero se llevó a cabo en Sala Equis la presentación anticipada de dos cortometrajes realizados por artistas para la gala de los próximos Premios BONOBO. Se proyectaron también tres cortometrajes premiados en la edición anterior, dejando a una sala llena, completamente boquiabierta.

Los Premios BONOBO nacen en 2016 con el objetivo de promover la libertad de expresión, junto con la diversidad sexual y la normalización social de estas diferencias. Hoy es ya un exitoso festival que logró abrirle las puertas al arte erótico, sumergiéndolo dentro una cultura fresca y creativa.

El Sexo Mandamiento estuvo en la presentación, que comenzó la programación con Alondra, de César Saldívar, donde el erotismo, o la representación del mismo, se traza con imágenes más bien abstractas y por momentos figurativas, combinadas con la voz en off de una joven de 21 años. Esta relata a lo largo del audiovisual cómo fueron evolucionando sus “momentos de locura”, desde los pétalos de flores, su primer contacto con el asiento de una bicicleta, hasta la cruz de Cristo. Estímulos que la hicieron vibrar desde pequeña, que sólo la inundaban de placer.  

Luego de “Sí es Sí”, de Laura Notario (un audiovisual más clásico, donde una joven le explica a su pareja un cortometraje que ha realizado, en el cual representa de manera un tanto absurda –en el claro buen sentido de la palabra –  el universo de Alicia en el País de la Maravillas), el evento nos traslada directamente al mundo surrealista de José Martos con su obra “IReligeoux”. Aquí el erotismo es sexo explícito. Escenas porno, BDSM, masturbación. Surrealismo y sin sentido se unen de la mano de cuerpos no hegemónicos para acercarnos una obra diferente, que atrae tanto al curioso como al más experimentado. Una mirada casi grotesca sobre lo erótico, que deja a más de uno con ganas de ver más.

El cuarto cortometraje nos acerca una pieza más sutil, en blanco y negro, sin diálogos, pero con algunos detalles que nos remiten a la obra de David Lynch. El uso de la repetición, los planos un tanto surrealistas, la cámara rápida y la fuerte presencia del sonido ambiente son ejemplos de ésto. La extraña, de Luisa Torregrosa, plantea el erotismo a través de la figura femenina en un ambiente cotidiano, con acciones cotidianas y la belleza de las curvas femeninas desnudas.

Para terminar, Angie Gray pone fin a la proyección con su pieza Waiting for Gala, siendo prácticamente el único audiovisual que hace referencia al amor y a la inspiración artística, sin recurrir siquiera a un desnudo parcial. ¿Gala?, ¿Dalí?, ¿Andre Bretón?, ¿Paul Eluard? ¿Max Ernst?

Estas cinco maneras de ver, representar, disfrutar e identificar el erotismo dejan a cualquiera reflexionando:

¿Qué es el erotismo?

La palabra «erótico» proviene de la expresión griega donde «eros» significa deseo o placer. Y claro está que lo que a uno puede generarle deseo o placer, a otro quizás no. La subjetividad en el erotismo es más amplia que la realidad personal de cada uno, y de eso se trata. 

Según la RAE, el erotismo puede significar: Amor o placeres sexuales, carácter de lo que excita el amor sexual e incluso exaltación del amor físico en el arte. Pero cuando hablamos de, por ejemplo, cine erótico, la tendencia es vincularlo enseguida con cuerpos parcial o totalmente desnudos.

Se ha comercializado tanto con el sexo, que pareciera inminente que la respuesta ante algunas preguntas sea siempre igual. La exposición diaria al consumo de productos que nos son presentados con connotaciones sexuales nos invitan a dudar si no es que estamos siendo seducidos por las marcas. Y hablamos de seducidos en términos de erotismo también. Algo que nos atrae lo suficiente como para rendirnos a sus pies… 

Es importante desprenderse de los impuestos culturales que pretenden explicarlos qué es sensual y qué no, e indagar en nuestras fantasías, nuestros deseos. Explorar hacia adentro y entender el erotismo como se nos de la gana. 

Así, estos cinco artistas han podido involucrarse con sus más íntimos deseos de forma tal que han logrado representar cinco maneras diferentes de vivir el erotismo. 

Pueden consultar algunas de las obras antes mencionadas aquí.

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