El erotismo no se encuentra solo en el cine y la literatura, también está presente en el cómic. Así, como en el cine está Lolita y en la literatura Fanny Hill, el llamado noveno arte cuenta con títulos y autores que ya han ascendido a la categoría de clásicos, como es el caso de El Clic.
Obra del historietista italiano Milo Manara, su primera edición se publicó en 1983. Más adelante tendría tres secuelas, de argumento muy similar, publicadas en 1991, 1994 y 2001. Su historia no es compleja sino que, como señaló la crítica española «se limita a enlazar una anécdota sexual tras otra».
La primera versión de El Clic tiene como protagonista a Claudia Cristiani, una joven aristócrata casada con un hombre mayor y más rico que ella. Claudia es fría y aborrece el sexo por completo. Un doctor enamorado de ella la rapta y le implanta en el cerebro el receptor de un mando a control remoto que, al activarse, despierta en ella un deseo sexual insaciable que raya en la ninfomanía. Esto le lleva a situaciones de lo más surrealistas en los lugares más inesperados.
El cómic es una sátira de las convenciones sociales de la burguesía, y no duda en tratar tabúes como el incesto o la zoofilia. El dibujo de Manara es explícito pero elegante. Su estilo es reconocible, sobre todo, por las expresiones de placer de las mujeres que dibuja.
El Clic tuvo una adaptación a película en 1985 y también fue convertida en una serie de siete capítulos en 1997. Otras obras conocidas de Milo Manara son El perfume invisible y Las aventuras de Giuseppe Bergman.