Ahora que el frikismo ya es mainstream – porque seamos sinceros, ¿quién no ha caído en algún momento en el lado oscuro?- y que ser un fan de Star Wars o de Juego de Tronos no nos convierte en unos parias sociales, demos un paso más y hablemos de sexo friki o, más concretamente, de juguetes perfectos para teletransportar a las cotas más altas de placer a los más fanáticos.
Así que, para todos aquellas personas que practican desmesurada y obsesivamente una afición (palabras de la RAE, no nuestras) o que, simplemente sienten pasión por algo, aquí van algunas propuestas para obtener placer solas o acompañadas.
Desenfunda la espada
Dicen que los frikis tienden a tener mucha imaginación y que les encanta la fantasía y la épica. A menudo sueñan con protagonizar grandes batallas, con empuñar espadas indestructibles y ser espadachines que nunca se rinden. Si este es vuestro caso, ahora también podéis sacar vuestra espada, no para dañar a nadie, sino para dar (o daros) placer. Aunque no sean de acero valyrio, ni sean la Llama del Oeste, podéis haceros con una espada-dildo con una gran empuñadura perfecta para la penetración y el juego. Sin duda, una vez que la probéis seguro que va a ser vuestra espada del poder. He-man.
Sexo de ciencia ficción
Para los fans de las marcianadas y que creen que no están solos en el universo, ¿qué mejor que proporcionarles algunas sensaciones extraplanetarias?
Hasta ahora la oficial Ripley es la única que ha disfrutado de la potencia sexual de Alien, pero eso se acabó con los dildos que evocan a este organismo perfecto y que os proporcionarán una experiencia única sacada de una película de ciencia ficción.
Mucho menos letales, pero igual de disfrutones, son los anillos de placer que podéis probar en vuestra próxima misión espacial. Se trata de masturbadores masculinos translúcidos perfectos para meter un poco de fantasía en vuestra cama.
Frikis del tamaño
Si el dicho ‘cuanto más grande mejor’ se aplica a vosotros y estáis un poco (o mucho) obsesionados con el tamaño, lo vuestro son los dildos gigantes que no bajan de los 20 cm o, incluso, los dildos gigantes y además eyaculadores. ¿Se puede pedir más realismo?
Aunque si no tenéis el día ni el cuerpo para dildos y preferís excitaros de otras formas, podéis probar con los masajeadores sexuales de gran formato, que tanto os sirven para un roto, como para un descosido, y con los que podéis pasar de destensar vuestras cervicales a llegar al orgasmo.
Para alternativos animalistas frikis
Y por último, para los que han llevado el frikismo a otra dimensión y su afición se basa en su amor desmesurado por los animales, esto les va a gustar: conejitos vibradores, pulpos succionadores de clítoris para los amantes de la vida submarina o incluso, plugs anales con cola que os llevarán más allá del felino o zorruno que cada uno lleva en su interior.
Así que, ya lo ves, si todavía no lo has hecho, saca el friki que llevas dentro y a ¡jugar!
Autora: Marta Molas, amantis.net.