La crisis sanitaria continua, la vida también; pero, en estos momentos es difícil encontrar a una persona con la que se pueda crear una conexión especial porque, lo que antes era lo más sencillo y lógico, ligar en un bar, discoteca, en alguna fiesta, reunión, etc., en esta nueva etapa se ha complicado totalmente. Hemos ido de lo físico a lo virtual y viceversa.
Anteriormente, hemos hablado de las apps de citas que por mucho que se usaran previo a la pandemia, fueron altamente utilizadas durante el confinamiento del año pasado y siguen siéndolo hoy en día con las regulaciones asociadas al Covid-19, las restricciones de viaje y el toque de queda, pues todo ello ha cambiado la vida cotidiana.
Por eso, en definitiva, nuestros hábitos han cambiado: no salir sin mascarilla, tener la higiene adecuada, tomar distancia, no tener la misma libertad de abrazar o besar a quien te apetezca… en general ser precavido. Pero, ¿qué hacemos cuando queremos conectar pero no conocemos a la persona ni si nos puede contagiar?
Mientras que hay personas dispuestas a arriesgarse y conocer gente durante esta etapa llegando hasta los besos e incluso sexo; hay quienes se lo llevan de forma relajada y se mantienen en alerta porque el coronavirus no se ha ido.
Existe la posibilidad de tener citas virtuales a través de plataformas como Zoom, FaceTime, WhatsApp, etc., pero claro, no es lo mismo que estar fisicamente con una persona y descubrir la química a través del lenguaje corporal, pero nuestra disposición a probar nuevas cosas aumenta con los meses por la creciente necesidad de cercanía después de más de un año de distanciamiento social.
Qué tendencias vemos ahora más que en otros momentos: gente que hace sexting incluso con alguien a quien acaba de conocer, masturbarse por videollamada, juguetes sexuales que se conectan a distancia, citas con mascarilla (aunque eso a muchos no les mola nada), o también gente que lleva su prueba de antígenos a una cita, por más absurdo que suene y sin tener la certeza de si es real o un falso negativo. Pero, en general se buscan y crean nuevas alternativas virtuales para evitar el sexo en solitario.
Asimismo, un estudio llamado Sex Trends 2021 de WowTech, una de las empresas premium en diseño y manufactura de productos de placer, reveló que los audioporno son una de las tendencias que se impusieron durante la pandemia y seguirá en auge de ahora en adelante. Somos testigos de métodos alternativos para despertar nuestra imaginación y estimularnos de una forma distinta a la acostumbrada. Porque, individualmente o en pareja, la mayoría de la gente ha visto porno alguna vez, aunque no todos lo disfrutan por igual o no se sienten identificados con los roles predominantes en el porno pues los consideran bastante fuera de la realidad o sexistas. Por ello, el audioporno intenta dar una alternativa para excitar a sus escuchas con audios eróticos, perfectos para aquellas personas más auditivas que visuales con historias eróticas que te enseñan el poder de la imaginación, en un mundo repleto de imágenes. Su popularidad ha ido en aumento especialmente para las mujeres. Y es que hay que recordar que el sexo es una experiencia sensorial: tocamos, vemos, olemos, probamos y escuchamos y, a través del audio erótico se pueden satisfacer las fantasías con palabras, gemidos y otros sonidos excitantes.
El distanciamiento social, el cuidado de nuestra salud y de la de los demás es una realidad actual y es imprescindible seguir las reglas para evitar una propagación mayor del virus. Es verdad que debemos seguir con nuestras vidas y como seres humanos necesitamos de una conexión real y del contacto físico pero, por ahora, existen muchos métodos alternos que pueden funcionarnos en lo que conocemos a alguien y decidimos tener algo más. No es el fin de las relaciones porque hay muchas parejas formadas a pesar de la cuarentena o la distancia social. La idea es no perder la esperanza, seguir con nuestras vidas, abrirse a nuevos métodos y disfrutar de las conexiones, las relaciones y el sexo.