Cuando hablamos de artistas, solemos mostrarlos como seres de otro mundo que logran sobresalir del resto para mostrar una parte de ellos que difícilmente muchos nos atreveríamos exhibir. Para David Bowie, la icónica leyenda de la música, de la moda, del arte, de la creatividad pero también de la sexualidad liberada en una época en que el rock estaba en auge como una manifestación cultural en un contexto en que los jóvenes estaban deseosos de ser parte de algo en lo que pudieran identificarse y sentirse parte, no había problema en destapar sus pasiones más hondas.
Durante los 70, en Gran Bretaña había una gran fábrica musical cargada de pasión, crítica y creatividad dentro de un ambiente revolucionario y, Bowie, supo aprovecharlo a la perfección. Su existencia estuvo cargada de provocación y controversia. Fue abierto y honesto con respecto a su sexualidad pues era algo muy importante para él en su vida y sobre el escenario. Tenía una gran capacidad de seducción lo que le permitió tener sexo con todo tipo de gente de distintas edades ya fueran artistas, modelos, cantantes, it-girls, etc.
Abiertamente bisexual al igual que su primera esposa, Angie Barnett, con quien formó una relación más por intereses en común que por amor, organizaban orgías y tríos con amigos y artistas del gremio como, según los rumores, Mick Jagger.
Además, es conocido por sus habilidades camaleónicas encarnando a distintos personajes que se mantienen en la historia del rock.
Con su alter ego, Ziggy Stardust, abandonó su personalidad para acoger la interpretación y volverse una celebridad con estatus y conocido mundialmente. Ziggy, un extraterrestre bisexual que termina consumiendo grandes cantidades de drogas y alcohol, se convierte en estrella de glam rock para salvar a la Tierra de un destino trágico e influir en el pensamiento de las masas. De esta forma explotó su sexualidad adoptando un estilo andrógino que, aunque causó shock por tal liberación sexual, terminó siendo aceptado y aplaudido por estar ligado al mundo del espectáculo.
Finalmente, Ziggy se autodestruye en un escenario en Londres después de haber caído en las pasiones y excesos más mundanos. Con este personaje desató rebeldía en el mundo del rocanrol siendo el álbum The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the spiders from Mars (1972), con temáticas como drogas, política y orientación sexual, uno de los mejores discos de los años 70.
Aladdin Sane, otro de sus polémicos personajes, supone un juego de palabras, “a lad insane” (un chico demente). El hombre con el rayo sobre la cara, que se volvió referente de la cultura pop, se basó en el lado oscuro de la cultura estadounidense. Sane representaba la dualidad de la mente, un tipo esquizofrénico que según se inspira en su hermano Terry quien sufría dicha enfermedad.
Luego apareció, The Thin White Duke (el delgado duque blanco), durante sus años oscuros en los que luchaba contra la adicción a las drogas. El duque era un hombre afligido pero romántico y sensible. Aquí se aleja de sus personajes andróginos y, en cierto modo asexuales, para vestir un estilo más elegante y aristócrata con cabello platinado. Estaba inmerso en la cultura alemana y causó una gran controversia y críticas luego de haber hecho el famoso saludo del que fuera el líder nazi, Adolf Hitler. Con los años dijo que dichas actitudes y las letras del disco se debían a su intoxicación por las drogas.
Hubo otras personalidades como Major Tom, protagonista de su canción Space Oddity quien al final de su vida se convierte en una especie de dios venerado por una sacerdotisa extraterrestre, el detective Nathan Adler, quien investiga una serie de asesinatos rituales cometidos por un colectivo, para terminar con su verdadero yo, en su último álbum.
Durante sus años de carrera, Bowie experimentó con distintos estilos musicales como folk, rock acústico, glam rock, experimental, progresivo, disco, etc., lo que lo convirtió en un referente de la música, de la sexualidad y de la originalidad como uno de los enigmas más grandes del rock.
El shock vende y, Bowie, quería que su rock fuera una especie de obra de teatro. Dentro de su ambigüedad sexual estaba el éxito de su música.
La sociedad actual nos impone como debemos actuar ante ciertas cosas o comportamientos. En aquella época la potencia sexual y la actividad eran los pilares fundamentales de la masculinidad. Los hombres, a diferencia de las mujeres, practican el sexo con desapego emocional y con falta de compromiso, por eso mantenía relaciones sexuales con todo tipo de personas. Pero, bajo mi punto de vista, creo que más que liberarse sexualmente lo que practicaba era una sexualidad de consumo o libertinaje en varios de los aspectos de su vida.